miércoles, 3 de marzo de 2010

123 – ME QUIERO DIVORCIAR YA! – CAMBIOS

Uno puede imponer o convencer. Presionar o sugerir. Ser autoritario o buscar consensos. Eso en cuanto a uno. Los demás pueden acatar o asistir. Obedecer o colaborar. Responder como enemigos o como socios. ¿Hablo del país, del gobierno, o de un régimen? Noooo, me refiero a los que integran mi familia.

Miércoles. Ayer los chicos volvieron a casa con toda la tarea realizada. Se bañaron, cenaron y cuando se fueron a acostar:

YO

Chau mis amorcitos, hasta mañana.

FABIO

Chau má.

DALILA

Chau mamotita.

YO

Este… mañana a la tarde volvemos temprano….

FABIO

Uh por fin!… quería jugar un rato con la Play.

YO

Si, pero tenemos que ir a ver unos edificios antes de almorzar….

FABIO

Yo sabía….

YO

Dale quejosito, es un rato nada más.

Entendía perfectamente que Fabio estaba saturado de idas y venidas por mi trabajo, pero era mejor explicárselo cariñosamente. Al fin y al cabo, era una criatura, rebelde, cuestionadora, pero criatura al fin. Al fin y al cabo, yo misma le había enseñado a tener su rutina diaria de compromisos para ser más eficiente. Al fin y al cabo, yo había establecido un esquema organizado para que se sintieran más seguros. Y todo eso se estaba alterando lentamente en función de mis obligaciones laborales. Con esa puja interna entre mi necesidad de progresar profesionalmente y la culpa que me generaba cambiarles la vida diaria establecida, me fui a dormir intranquila.

Quizás hubiera resultado más simple decirle: “Porque lo digo yo y basta”… Pero no es la manera que funcionan las decisiones que afectan a muchos. Ya lo venía observando claramente en nuestro país. Plagado de políticos y gobernantes que se atropellan unos a otros resolviendo sin tener la más mínima noción de lo que pueden conmocionar a los ciudadanos esas medidas. Y una familia es como un país. Para que que uno vaya generando cambios necesarios, es imprescindible buscar consensos con todos los involucrados.

Por la mañana, salimos en horario como para ver a Daniel Marcos en el primer edificio de Belgrano.

Cuando llegué, era temprano y fuimos a recorrer la cuadra para que los chicos no se aburrieran. Ver vidrieras no era un acto que me apasionara especialmente. Desde el mismo momento que tuve a mis hijos, todo lo que adquiría -fuera de la comida-, se refería específicamente a cosas que ellos necesitaran. Hice un poco de memoria y no pude recordar cuándo fue la última vez que me había comprado ropa.

El edificio estaba situado a pocos metros de la Avenida Cabildo. Por lo tanto, teníamos una sucesión de comercios uno al lado del otro. Dalila se detenía donde había prendas de nenas, y Fabio en las jugueterías. Hasta que de pronto apareció una veterinaria. Ese era el lugar exacto en que los tres coincidíamos con emoción. Sobre la vidriera había en exposición animalitos cachorros, gatitos y perritos:

DALILA

Ay!!!! Qué lindos son todos!….

FABIO

Están re buenos….

DALILA

Má… ¿Cuándo vamos a tener un perrito?

YO

(Pensando en una posible mudanza)

Y… no creo que podamos….

FABIO

Uhhh… mirá ese marrón que está allá atrás….

YO

¿Cuál?

FABIO

(Señalando)

Ese!…

DALILA

Ay mamotita… entremos a verlo….

Era tanto el entusiasmo que no me pude negar. La persona que nos atendió lo sacó de la jaulita y lo trajo al mostrador.

YO

Qué hermoso es….

FABIO

Mirá qué cara de bueno tiene….

DALILA

(Acariciándolo)

Un amor…

EMPLEADA

Es un machito Labrador de dos meses color chocolate.

Muy buen animalito para estar con los chicos…..

Y se habitúa perfectamente a departamentos o casas….

YO

¿Cuánto cuesta?

EMPLEADA

Quinientos pesos.

DALILA

Má… comprémoslo!….

YO

(Contrariada)

No podemos….

Nos fuimos de ahí apesadumbrados por dejar al “Choco” como le decían los niños. Cuando volvimos al edificio, recién llegaba el Sr. Marcos.

DANIEL MARCOS

Disculpe, el tránsito estaba tremendo.

YO

No hay problema.

DANIEL MARCOS

(A los chicos)

¿Cómo andan los asistentes de Milena)

DALILA

Bien.

FABIO

Mal.

DANIEL MARCOS

Otra vez mal? La última vez que te ví estabas igual.

¿Qué te pasa?

FABIO

Quiero un perro y mi mamá no me lo quiere comprar.

DANIEL MARCOS

¿Y no intentaste convencerla?

Estuvimos la siguiente hora mirando en detalle los dos edificios. Fabio filmó con mi celular las fachadas, los detalles de terminación, en fin, todo. El Sr. Marcos me consultaba permanentemente cuestiones de presentación para la venta. Se trataba de departamentos de excelente calidad, con ambientes muy amplios y grandes parques en la planta baja. Sin dudas, un producto que sería muy fácil vender. Cuando nos despedimos, quedamos en que iría al otro día a su oficina para formalizar la comercialización.

Luego nos fuimos con los chicos a comer a Mc Donald´s.

YO

Está rico lo tuyo hijo?

FABIO

Seeee.

YO

Y vos mi amor?

DALILA

Si má.

YO

Bueno, estamos bien con los tiempos.

Comemos tranquilos y nos vamos a los colegios.

FABIO

Má… ¿Por qué no podemos tener un perro?

YO

Porque no estamos nunca en casa

¿O querés que se quede solo todo el día?

FABIO

Y si lo dejamos en el auto?

YO

A vos te gustaría que te hicieran eso?

FABIO

(Pensando)

Y… no. ¿Y si va con nosotros a todos lados?

Fueron 45 minutos intensos desde que terminamos de comer hasta que los llevé a los colegios. Fabio no dejó de acosarme con alternativas para que pudiéramos acomodar al perro en nuestras vidas. Me lo decía con tanta pasión, con tanta emoción, con tanto amor, que no me quedó otra que responderle que lo pensaría.

Cuando llegué a la oficina:

BLANQUITA

Milena!… ¿Todo bien?

YO

Si, casi bien.

¿Vos te imaginás si un día te dejo de vuelta a los

chicos haciendo los deberes como ayer,

pero a eso le agrego un perro?…

BLANQUITA

Nos echan a las dos…

YO

Si, eso pensé…. Bueno, tema terminado.

¿Alguna novedad?

BLANQUITA

Si, acá tenés los llamados de los clientes que necesitan que te comuniques.

Y acordate que a las 14 hay reunión de ventas.

YO

Uhhh menos mal que me avisaste. Claro, hoy es miércoles.

BLANQUITA

(Confidente)

A ver si averiguás qué le pasa a Piña. Está como ido.

YO

Bueno.

Me fui a mi escritorio.

YO

(A Jorge)

Qué dice señor gerente? Ja Ja Ja…

(A Claudia)

Y usted, señora tasadora? Je Je Je

Me senté en la compu y grabé un CD con las filmaciones de los edificios. A los pocos minutos nos avisaron que fuéramos a la reunión habitual. Siempre la realizábamos en la sala de firmas, el mismo lugar donde habían estado haciendo los deberes mis hijos el día anterior.

SR. MORGANTE

Buenas tardes muchachos.

Hoy tenemos muchas novedades para contarles.

Pero, primero comencemos por ustedes.

JORGE

Yo concreté una reserva por un departamento

del edifico de la calle Avellaneda.

Esa persona, para comprar tiene que vender un usado.

SR. MORGANTE

Y ya lo tomó?

JORGE

Si, ya está todo listo para salir a la venta.

CLAUDIA

Y yo tuve otra reserva también por Avellaneda,

pero de contado, se puede firmar el Boleto esta misma semana.

SR. MORGANTE

Y le avisaron a Daniel Marcos de todo esto?

YO

Si, ayer me reuní con él.

SR. MORGANTE

¿Piña fuiste con ella?

ARQUITECTO PIÑA

Eh… la verdad que no.

SR. MORGANTE

¿Por qué?

ARQUITECTO PIÑA

Porque ví que Milena y Marcos se entienden perfectamente.

Realmente no hacía falta.

SR. MORGANTE

Está bien, pero es una cuestión de imagen.

Deberías acompañarla en esos casos.

¿Y tasaciones hicieron?

JORGE

Yo tasé cuatro usados, todos por Caballito.

SR. MORGANTE

Y tomó alguno?

JORGE

Me autorizaron tres.

SR. MORGANTE

Bien. ¿Y usted Claudia?

CLAUDIA

Yo hice cuatro tasaciones también, y tomé dos.

SR. MORGANTE

¿Milena?

YO

Yo tasé 15 propiedades, tomé 10 y lo más importante….

¡Tenemos dos edificios más de Daniel Marcos!….

JORGE

Ah bueno… nos quedamos a vivir en la inmobiliaria…

SR. MORGANTE

Qué dijo?

JORGE

Que no damos abasto para atender a

todos los interesados que consultan.

SR. MORGANTE

¿Es así Piña?

ARQUITECTO PIÑA

Si, se lo dije los otros días. El trabajo nos está superando.

SR. MORGANTE

Bueno, tomá dos vendedores más de salón…

ARQUITECTO PIÑA

Lo hago esta misma semana.

SR. MORGANTE

Milena ¿Es seguro lo de los edificios?

YO

Si, como la otra vez con Avellaneda. Mañana lo voy a autorizar.

JORGE

(A mí)

Ché… ¿y son buenos?

YO

Claro!… Acá traje un CD con unas filmaciones que hice esta mañana.

SR. MORGANTE

A ver, Piña ponelo por favor….

ARQUITECTO PIÑA

(Acercándose al Reproductor)

A ver… ¿Cómo era?…. Por acá?… Epa!… y esto?…

¿Un sándwich de miga abajo del televisor?

YO

(Avergonzada)

Eh… me parece que es mío…..

JORGE

Ah… los chicos de Milena estuvieron acá anoche.

YO

Si, disculpen, pero no tenía donde dejarlos….

Tenían que hacer los deberes…

Pero, Sr. Morgante, no se preocupe que no va a volver a pasar…

No los traigo más.

ARQUITECTO PIÑA

Igual, ella me dijo que se va a alquilar algo por acá….

YO

Si, estoy esperando que aparezca un departamento chiquito y barato.

SR. MORGANTE

Ah…. ¿Y de un ambiente le sirve?

YO

Si, lo que sea.

SR. MORGANTE

Piña, dale las llaves de la oficina que tenemos acá arriba.

ARQUITECTO PIÑA

La del piso 14º?…La va a alquilar? No sabía…

SR. MORGANTE

Si, hace rato que ya no la usamos. Milena fíjese si le gusta.

YO

(Emocionada)

Bueno, si… y le puedo pagar un año por adelantado….

SR. MORGANTE

No se preocupe, si le sirve se lo descontamos

directamente de las comisiones.

Piña, mirá el precio, no sé cuánto vale el alquiler…..

En ese momento sentí que me explotaba el corazón de la emoción. Todo lo siguiente que se habló en la reunión lo tuve que anotar para no olvidarlo. Mi mente estaba en otro lado.

SR. MORGANTE

Bien, para terminar unos comentarios. Milena,

ya está reservado un salón de conferencias en

un hotel internacional del centro. ¿Se ocupa de hacernos un

listado de constructores para invitar?

YO

Si.

SR. MORGANTE

Ah… ¿Y cómo anda lo del inversor español?

YO

Ya tengo todo seleccionado y revisado,

solo me falta hacerle una carpeta con los detalles

y llevarlo a que los vea.

SR. MORGANTE

Bien, acompañala en este tema Piña, no la dejes sola.

ARQUITECTO PIÑA

Si.

SR. MORGANTE

Bueno, finalizamos con un anuncio.

(A Piña)

¿Lo decís vos?

ARQUITECTO PIÑA

Eh… si, no hay problema. ….

Piña estaba nervioso, se lo notaba tenso y con dificultades para comenzar a hablar.

ARQUITECTO PIÑA

Quería contarles… que me voy de la empresa….

CLAUDIA

(Triste)

Ay.. qué pena….

YO

(Sorprendida)

No puede ser…

JORGE

(Eufórico)

¿Necesitan un gerente?

No hay comentarios:

Publicar un comentario